Sueños

16 de marzo de 2010

Quisiera abrazarte fuerte

y susurrarte al oido

cuan importante fuiste en mi vida

hermano mío.

Vivir por unos instantes

junto al lugar

que Dios te ha ofrecido

y mirar a todos con alegría

diciendo a gritos

Roberto está conmigo.

Que locura son los sueños,

pero yo los necesito

para ilusionarme aunque sea un poquito

y dejar mas pasajero este duelo maldito.

Quiero que desde allá te sonrias

de mis tormentos,

de todo lo que hacemos

aunque sea tan sólo por un momento.

Te amo cada día mas

aunque ya no estes a mi lado

Dios te pase el mensaje

y te quede bien claro

que así fue siempre

y será hasta siempre.

Te amo!

Besos

María Alejandra hermida

Meta cumplida

01 de marzo de 2010

Sufrí el día 6 y 7 de enero una lumbalgia como nunca, me costaba subir las escaleras y levantarme de la cama. Cada vez sentía que me aumentaba más y gracias a la Chacha que me dió dos analgésicos me calmó. Y me preguntaba "por qué? si yo quiero cumplir la meta de mi hermano" y por las noches le pedia a Dios su ayuda, y como siempre tuve su respuesta.

Es así que el día 8 subimos al cerro ñuñorco, no pòdía creer que no me doliera nada, se que Dios junto a vos planearon para que todos cumplieramos esa meta, la que siempre hubieras querido lograr.

Sabes sentí algo especial que nunca voy a poder olvidar, fue una de mis mejores experiencias después de haber parido a mis hijas; y eso que a mitad de camino creia plantar y gracias a Rubén, tu amigo, que me tomó de la mano y me dijo: "Vamos Ale tenemos que continuar Roberto quiere que lleguemos arriba", pude continuar.

Fue una experiencia emocionante, angustiante y al mismo tiempo feliz por el sólo heche de haber logrado estar en la cima desparramando tus cenizas junto con las de papá al viento.

Gracias a los dos por haber ayudado a conseguir esa bellisima meta, la cual guardaré por siempre dentro de mi corazón.

Te amo!

Besos y hasta siempre.

María Alejandra Hermida

Esperando llegar

02 de diciembre de 2009

Pasan los meses y se acerca fin de año

mas presente tengo en corazón y mente

tu falta plena de hermano.

Se que en algún rincón

se encuentra tu alma

quizas en el camino de esperanzas

o en el acercamiento pleno a Dios

tu Padre eterno.

Abrazalo fuerte a él

y confiale sobre tu vida,

él sabrá responderte en que te equivocaste,

pero de ahora en más

será tu guía por siempre.

Besale sus manos,

agradecele todo lo que hayas descubierto a través de él

y te pido que sigas siendo nuestro ángel protector

día y noche.

TE AMAMOS, TE EXTRAÑAMOS, PERO SABEMOS QUE ESTAS EN PAZ Y LO MERECES.

María Alejandra Hermida

Hermanos por siempre

07 de octubre de 2009

Dos hermanos que se quieren,

se buscan por la vida de verdad.

Dos hermanos que se quieren,

qunque uno de ellos no esté en esta vida

se sabrán buscar.

Dos hermanos que se quieren,

uno acá, el otro más allá,

supieron de algún modo

cómo volverse a encontrar.

María Alejandra Hermida

El pensar

28 de septiembre de 2009

Cuanto te extraño hermano mio, de ti no dejo de pensar.

Se que eso no es malo, pero me hace angustiar.

Y de esa manera me pregunto, a quién pudiera asi yo guiar; si en partes quiero yo dar el ejemplo, de que no debemos por ti llorar, y recordarte con alegría cada día más.

Se que el duelo tienen su proceso y por él tengo que pasar, pero a veces espero que vos seas mi guía, logrando darme fuerzas para poder sobrellevar ésta pérdida cruel que siento y no me deja respirar.

Te amo, te adoro y te recuerdo cada día de mi vida.

¡Hasta siempre!

Tu hermana...

Carta de Patricio Marcial a su amigo Roberto Hermida

21-11-2009
A Roberto Hermida
Hermano Roberto te fuiste e silencio a la eternidad, la muerte traicionera te pialó con su guadaña invisible, Tata Dios te mando a llamar, será que hacías falta allá en el cielo, para escribir tus poesías con los ángeles, mas yo le pido a Dios por tu descanso en la gloría.
Hermano Roberto te conocí lidiando con la cultura entre Menhires y Tolares de nuestros Valles Calchaquíes, en Buenos Aires dejaste al Obelisco Mudo de Tristeza, pero tu corazón estaba aquí en este bendito Valle, por eso ahora el Valle llora tu partida junto a los cerros, cardones, conanas y queñuales.
Yo te recuerdo con el poncho al viento y tu boina vasca trajinando estos cerros con una lapicera en la mano, para escribir tus poesías junto a los siete morteros que lloran tu partida. Dios tenga tu alma en la gloria, el lucero y las tres Marías te cantaran las letanías.
A este Roberto siempre por los valles lo veía venir, meta lidiar con la cultura al hombro por estos cerros horas entera te pasabas contemplando este valle, tu cenizas volaron por todo el Valle Calchaquí, para quedarse junto con los torales y menhires de Tafí.
Como te van a llorar las calles porteñas, allí dejaste tu impresión digital de tu niñez añorada, seguramente del cielo estarás mirando, como se conjuga el verbo de una baguala.
Bueno Roberto tu muerte, yo no puedo llorar, mis lagrimas son la poesía, la greda, la arcilla y el tolar. Porque de ahí nacen las bagualas de mi raza ancestral.
Patricio Marcial